Este jueves el Gobierno nacional publicó el decreto 116/2025 en el Boletín Oficial, donde modificó la organización del banco fundado en 1891; esta redefinición podría ser el primer paso para un eventual ingreso de capitales privados. Para el gremio La Bancaria es “otra estafa de Milei”.

Tras el intento fallido de privatización por quedar excluido de la Ley Bases, el Gobierno convirtió por decreto este jueves al Banco Nación en Sociedad Anónima. La transformación de la persona jurídica no implica que la entidad deje de ser pública sino que quita ciertas restricciones que tenía al ser una Sociedad del Estado y otorga una mayor apertura para su capitalización.
En este sentido, en los considerandos del decreto 116/2025 se señala que “el régimen de entidad autárquica limita la capacidad del Banco Nación para competir en igualdad de condiciones con otras entidades del sector financiero, restringiendo su acceso a nuevas fuentes de financiamiento y su capacidad de desarrollar estrategias comerciales más dinámicas y eficientes” en beneficio de sus clientes.
“La transformación en sociedad anónima contribuirá a modernizar su estructura jurídica y operativa, permitiendo una mayor flexibilidad en su gestión y adaptación a las mejores prácticas del mercado financiero, incorporando mecanismos de gobierno corporativo más ágiles y eficientes y una administración más profesionalizada y alineada con estándares internacionales de transparencia, eficiencia y control”, indica.
Además, sostiene que permitirá optimizar la asignación de recursos, fortalecer su posición en el mercado y potenciar su capacidad de financiamiento, en beneficio de sus clientes y del desarrollo económico en general.
En el Gobierno consideran que la Sociedad del Estado era una figura jurídica que daba privilegios tales como una descapitalización permanente sin riesgo de default, lo que obligaba a seguir fondeando a pesar de la ineficiencia.
También, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, dijo a través de su cuenta de X: “El Decreto 116/25 permite que el banco mejore su transparencia y gobierno corporativo. El decreto también limpia casi todo el estatuto eliminando privilegios (por ejemplo el Art. 31 que obligaba a que los depósitos judiciales fueran en dicha institución)”.
La SA -en principio, no hay dichos de funcionarios que indiquen esto- permite además una posible salida a la cotización en bolsa, como en el antecedente del Banco do Brasil o en otro rubro con YPF. En ese caso, funciona como un banco comercial que busca rentabilidad, pero con mayor o menor incidencia del Estado de acuerdo a si se decide mantener un esquema mixto en la propiedad del capital social.
En este sentido, Guillermo Francos, actual jefe de Gabinete, había afirmado en abril pasado: “El presidente Lula en Brasil, en su primer mandato, llevó al banco de Brasil a capitalizarse en la bolsa de Nueva York. El banco cotiza afuera del país y tiene un capital impresionante. Es el banco más grande de ese país. Si un banco público en Brasil, bajo la presidencia de Lula, se convirtió en una empresa que cotiza en bolsa y que incluyó capital privado, ¿por qué no hacerlo nosotros acá? Estamos en un concepto viejo, de no permitir el trabajo conjunto del capital privado y público”.


“Un banco que cotiza en la bolsa genera una serie de controles y transparencia en la gestión que va a cambiar absolutamente la concepción de la banca pública en la Argentina. Todo esta cosa que hoy se hace un poco oculta: a quién se le da crédito, cada tanto escuchamos un escándalo, que se lo dio a una empresa que quebró, etcétera; todo eso, cuando una empresa cotiza en la bolsa, está absolutamente controlado y transparente. Son pasos importantes que tenemos que dar hacia la eficiencia y transparencia de la banca”, comentó.
De todos modos, es importante destacar que esta figura jurídica facilita una privatización parcial o total. Arrigoni consideró que “el Banco de Nación es la columna vertebral del sistema bancario argentino. Hay que tener mucho cuidado con el tema de la privatización. Hay determinados elementos que están en manos del Estado y pueden estar en manos privadas pero hay otros que no. Aparte asiste a algo que es fundamental, que es a las pymes argentinas y al campo”.
Por su parte, y consultado esta mañana por una posible privatización, el ex director del Banco Nación, Carlos Melconian, opinó: “La flexibilidad de la gestión, la administración profesional, la transparencia, la eficiencia, el capital, el control, la auditoría, la rentabilidad y el fondeo son palabras claves”.


“En la madrugada, bien al estilo de las oscuridades de este Gobierno, salió un decreto donde el Presidente transforma el Banco Nación en una sociedad anónima”, alertó el secretario general de la Asociación Bancaria y diputado de Unión por la Patria, Sergio Palazzo, en lo que a todas luces dijo que parece ser un nuevo negociado y una forma de correr el foco del cripto-gate.
El anuncio fue llevado a cabo el miércoles cerca de la medianoche por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y según explicó Palazzo puede traducirse claramente en el marco de un intento de privatización. Idea que no es muy alocada teniendo en cuenta que la primera embestida del Gobierno contra la empresa fue con el mega DNU del 2023.
Además, se da en el marco del escándalo de la estafa con $Libra que salpica al Presidente hace ya casi una semana y que no puede sacar de agenda. “Es el mismo que está denunciado por estafador, que lo investiga el FBI, que fugó el oro y nadie sabe dónde está, que —según periodistas— su entorno cobra las audiencias”.
“Ese Presidente es el que acaba de emitir un decreto para avanzar con la privatización de un banco, de un bien nacional cuyo valor es de 30 mil millones de dólares”, dijo, sucintamente, en un breve resumen de la gravedad de lo que se tiene en frente.
Y explicó qué hay detrás de esto: “Por eso entendemos que es un negociado a todas luces. Uno más, donde seguramente tendremos que contar con la voluntad de muchos legisladores para rechazar cualquier intento de privatización parcial o total”.
Tras lo que añadió: “Esto ocurre porque tiene las facultades delegadas por la Ley Bases, y lo dicen en el fundamento del decreto. Presentemos nosotros un proyecto para que se cancele esta delegación, habida cuenta de toda esta estafa que significa el cripto-gate en el que está involucrado como partícipe necesario”.
En tanto, sobre el negociado, precisó: “Este es el segundo paso. La semana pasada hubo una reunión en Estados Unidos con autoridades del banco para tratar de colocar una obligación negociable”.
Explicó: “Esto es un título que saca el banco y que dice que necesita mil millones de dólares. Alguien compra esa emisión y tiene vencimientos. Si vos no pagás, te ejecutan la garantía”.
En el marco de toda esta maniobra, dijo Palazzo, van a poner al Banco Nación como sociedad anónima “para poner de garantía las acciones del banco”.