En abril, la actualización será por el Índice de Precios al Consumidor más un monto extra que será del 12,5% por ciento. Luego, a partir de mayo, el ajuste será por inflación.

Después de varias semanas de negociaciones, dudas y especulaciones políticas, Javier Milei, en sintonía con el ministro de Economía, Luis Caputo, decidió avanzar por la vía de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) con la delicada modificación de la fórmula jubilatoria. La medida se evaluaba desde hace semanas, pero el Presidente la postergaba porque aspiraba, antes de llegar a esta instancia, lograr un consenso previo suficiente para tratarlo por ley -por fuera o dentro del proyecto Bases-. Quería y evitar una eventual judicialización del decreto o un posible rechazo de parte del Congreso.
Según trascendió, el Poder Ejecutivo determinará por decreto que las jubilaciones en abril se actualizarán por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), más una compensación que será del 12,5% por ciento por la inflación de enero. Cabe distinguir que la oposición había presentado un proyecto en Diputados para que el empalme sea mayor al 20%, porcentaje del poder adquisitivo que perdieron los adultos mayores desde la inflación de enero.
En un principio, la gestión de Javier Milei pretendía que la nueva fórmula jubilatoria se tratara como un capítulo dentro de la nueva ley Ómnibus, que de acuerdo a los tiempos que quiere manejar la Casa Rosada, se trataría en Diputados recién a mediados de abril.
Si bien la nueva ley ómnibus viene cosechando consensos en buena parte de su contenido, tanto el bloque Pro como el radicalismo y Hacemos Coalición Federal –los bloques más amigables para el oficialismo– le plantearon al Gobierno que era imperioso cambiar cuanto antes la fórmula previsional, luego de la fuerte pérdida del poder adquisitivo que tuvieron los haberes jubilatorios en los primeros dos meses del año.
En tanto, los diputados opositores de la Comisión de Previsión y Seguridad Social decidieron impulsar una ley de movilidad jubilatoria por su cuenta.
En el borrador de la nueva ley Ómnibus, el Gobierno había propuesto una fórmula jubilatoria que indexe por inflación a partir de abril con una compensación adicional del 10% por la inflación de enero. Los bloques dialoguistas de Diputados exigían una compensación mayor, que contemple enteramente lo que los jubilados y pensionados perdieron por la inflación del primer mes del año, que fue de 20,6%.