Nicolás Maduro juró este viernes para un nuevo período presidencial en Venezuela en medio de un amplio dispositivo de seguridad y con parte de la oposición junto a Estados Unidos denunciando un golpe de Estado.
“Juro por Bolívar, por Sucre, por Urdaneta, por Manuela Sáenz, por la memoria de nuestro amado jefe y comandante Hugo Chávez (…) Ante esta Constitución, que haré cumplir todos sus mandatos y obligaciones, que este nuevo periodo presidencial será el de la paz, la prosperidad y la democracia, lo juro por la historia y mi vida”, afirmó Maduro con la mano en la Constitución.
Rodeado de decenas de funcionarios, tras recibir la banda y jurar para su tercer período, Maduro arremetió contra sus críticos.
“A los que atacan la patria desde el exterior les digo que somos los redactores de esta Constitución, que nació a pesar de ustedes los oligarcas (…) Que nació a contra pelo de las aspiraciones imperiales, ha sido defendida por el pueblo y esta constitución está victoriosa y Venezuela está en paz, en pleno ejercicio de su soberanía”, sostuvo.
La oposición, en tanto, denunció “la consumación de un golpe de Estado”.
“El 28 de julio del 2024 por lo menos 7.443.584 venezolanos dijeron fuerte y claro que Edmundo González Urrutia es quien este 10 de enero debía jurar como Presidente para guiar el destino del país por los próximos seis años, en fiel cumplimiento de los artículos 5 y 231 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”, sostuvo un comunicado de la cuenta oficial de la opositora Plataforma Unitaria Democrática.
“Con la usurpación del poder por parte de Nicolás Maduro de la Presidencia de la República, apoyado por la fuerza bruta y desconociendo la soberanía popular expresada contundentemente el pasado 28 de julio, se ha consumado un golpe de Estado en contra de los derechos del pueblo venezolano”, subrayó la nota.
En las elecciones presidenciales de julio de 2024, el Consejo Nacional Electoral proclamó a Maduro reelecto, pero nunca mostró las actas que lo acrediten, mientras que la oposición, que denuncia fraude, presentó sus propias actas que dan como vencedor a González Urrutia por más del 60%.
En este clima de tensión, la asunción de Maduro, que llegó al Ejecutivo en 2013 tras la muerte de Chávez, requirió un fuerte despliegue de seguridad en las calles y también en las fronteras, con la suspensión de los vuelos provenientes de Colombia hasta el 13 de enero.
Horas antes, Caracas había informado sobre el cierre de la frontera terrestre entre ambos países.
La medida fue establecida en momentos en que González Urrutia, quien se proclama presidente electo, dijo que regresaría al país para jurar como Presidente.
El político opositor, exiliado y con orden de detención en su contra, es respaldado por varios países y una buena porción de venezolanos, tanto en el exilio como en la propia nación.
Hasta ayer se creía que permanecía en Santo Domingo, República Dominicana, acompañado de una decena de exmandatarios de la región.
No está claro cuántos jefes de Estado asistieron a la ceremonia de investidura. Las cámaras mostraron a los presidentes de Nicaragua, Daniel Ortega, y de Cuba, Miguel Díaz-Canel, mientras que se informó que Maduro saludó a delegados de “más de 120 naciones”.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, un aliado cercano de Maduro, dijo que no asistiría al evento debido a las detenciones, a principios de esta semana, de otro miembro de la oposición venezolana y un defensor de los derechos humanos.
