Confirmaron que el jefe del Grupo Wagner murió en el avión que se estrelló en Rusia

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El Ministerio de Emergencias había comunicado previamente que habían muerto las diez personas que estaban a bordo del avión privado, que se estrelló cerca del pueblo de Kujenkino, en la región de Tver, al noroeste de Moscú.

El jefe del grupo paramilitar ruso Wagner, Yevgueny Prigozhin, estaba a bordo del avión privado que se estrelló hoy en la provincia rusa de Tver con diez personas a bordo, confirmó la agencia rusa de transporte aéreo Rosaviatsiya, después de que se informara que no hubo sobrevivientes, el grupo paramilitar acusò a Rusia y advirtió sobre “cosecuencias catastróficas”.

La agencia publicó una lista con los siete pasajeros y los tres miembros de la tripulación que viajaban en el Embraer, que iba de Moscú a San Petersburgo, entre ellos Prigozhin y Dmitri Utkin, uno de los fundadores y comandante de Wagner, así como otros miembros de la agrupación, según informó la agencia Sputnik.

“Se ha iniciado una investigación sobre el accidente del avión Embraer ocurrido esta tarde en la región de Tver. Según la lista de pasajeros, en ella figuraba el nombre de Yevgueny Prigozhin”, indicó la agencia Rosaviatsiya, según las agencias de noticias Tass, Ria Novosti e Interfax.

Según un responsable de los servicios de emergencia, citado por la agencia Ria Novosti, hasta ahora se encontraron los cuerpos de ocho personas.

Por su parte, el Grupo Wagner confirmó la muerte de su lìder y reaccionó en duros términos. ”Yevgeny Viktorovich Prigozhin, jefe del Grupo Wagner, héroe de Rusia, un verdadero patriota de su Madre Patria, murió como resultado de las acciones de los traidores a Rusia. ¡Pero incluso en el infierno será el mejor! ¡Gloria a Rusia!”, señaló un mensaje en el canal de Telegram Grey Zone, perteneciente al grupo mercenario ruso, que citó información del periodista Alexey Larkin.

“El asesinato de Prigozhin tendrá consecuencias catastróficas”, advirtió también la publicación en Telegram. Y añadió: “Las personas que dieron la orden no entienden en absoluto el estado de ánimo en el ejército y la moral. Que esto sea una lección para todos. Siempre hay que llegar hasta el final”.

Prigozhin combatió junto a miembros de Wagner en Ucrania hasta junio pasado, cuando encabezó una rebelión contra el Ejército ruso que llevó a que el presidente Vladimir Putin lo tildara de “traidor”.

Luego del incidente con el avión Embraer, circulaban videos en Telegram, cuya autenticidad no pudo ser confirmada por la agencia de noticias AFP, en que se veía a un avión impactando contra el suelo o restos del aparato en llamas.

El Grupo Wagner escribió en su canal de Telegram que Prigozhin “murió como resultado de las acciones de los traidores a Rusia”, informó el diario The Guardian.

“El Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso lleva a cabo las operaciones de búsqueda” de las víctimas del avión estrellado, indicó un comunicado.

Mientras se realizaban las operaciones de búsqueda, Putin participaba en una ceremonia conmemorativa de la batalla de Kursk, durante la Segunda Guerra Mundial, en la cual se abstuvo de cualquier alusión al incidente.

En su discurso en esa región, fronteriza con Ucrania, y ante soldados movilizados por la ofensiva en la exrepública soviética, Putin ensalzó a quienes “combaten con valentía y determinación”.

Aseguró que “la devoción a la patria y la lealtad al juramento militar unen a todos los participantes en la operación militar especial”, en referencia a la invasión lanzada por las tropas rusas a fines de febrero de 2022.

Después de convertirse en una figura de primer plano en Rusia por la participación de Wagner en la guerra de Ucrania, Prigozhin lideró el 24 junio una insurrección contra el Ministerio de Defensa y el Estado Mayor del ejército regular.

El levantamiento se produjo después de que el presidente ruso anunciara que los combatientes de Wagner tenían que firmar contratos con el Ejército.

Putin había tildado a Prigozhin de “traidor” cuando este se apoderó de cuarteles del sur de Rusia y emprendió una marcha hacia Moscú, pero no llegó porque, con la mediación del mandatario de Bielorrusia, Aleksandr Lukashenko, la sublevación de agotó en 24 horas.

Cuando la noticia de la caída del avión estaba en las portadas periodísticas del mundo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo esta tarde que no le “sorprende” la posible muerte del jefe del grupo paramilitar Wagner.

“No sé muy bien qué pasó todavía, pero no me sorprende”, dijo a los periodistas.

“En Rusia suceden pocas cosas sin que Putin tenga algo que ver”, añadió el mandatario.

El asesor presidencial ucraniano Mijail Podoliak dio por descontada la muerte del jefe de los milicianos.

“La eliminación espectacular de Prigozhin (…) es una señal de Putin a las élites rusas antes de las elecciones [rusas] de 2024”, afirmó en la red social X (ex Twitter).

El lunes, Prigozhin apareció en un video difundido por grupos cercanos a Wagner en que decía estar en África.

“La temperatura es superior a los 50 grados, tal y como nos gusta. El grupo Wagner realiza una misión de reconocimiento, haciendo a Rusia aún más grande en todos los continentes y a África aún más libre”, declaró en ese video, que lo muestra en un paisaje desértico.

En junio, el presidente de la Comisión de Defensa de la Duma rusa, Andrei Kartapolov, informó que el Ministerio de Defensa ruso aprobó una declaración por la que todas las formaciones militares que participaran de la guerra en Ucrania, incluidas los paramilitares, debían adherirse a esa cartera.

Todas las organizaciones aceptaron, “excepto el señor Prigozhin”.

En la efímera sublevación de junio, que duró un día, Prigozhin desafió frontalmente la autoridad de Putin, tomó posiciones en la ciudad de Rostov del Don, y desde allí avanzó con sus hombres a menos de 400 kilómetros de Moscú.

Finalmente, el jefe de las milicias y el Kremlin llegaron a un acuerdo: Prigozhin se asiló en Bielorrusia, se dejó sin efecto el expediente penal en su contra y ninguno de sus subordinados sería enjuiciado.

Una parte de los milicianos, muchos reclutados en cárceles, participaron en la formación de las Fuerzas Armadas de Bielorrusia.

Tras los cambios políticos y económicos vividos en Rusia durante la década del 90, Prigozhin se convirtió en un estratega que pasó de estar casi nueve años en prisión a construir un imperio hotelero y luego a ser líder del grupo paramilitar más importante de Rusia.

Wagner intervino a favor de separatistas en la región ucraniana de Lugansk y luego se extendió a Siria, donde Rusia ejercía como aliado de Damasco.

Luego se acercó a África, donde, según Estados Unidos y sus aliados, actuaba como brazo armado de las juntas militares que asumieron el poder en los últimos años, como en Mali.

Prigozhin fue acusado por EEUU de interferir en las elecciones estadounidenses de 2016 a favor Donald Trump.

Tras la invasión de Rusia a Ucrania, el líder de Wagner confirmó que había fundado el grupo de mercenarios en 2014, en una decisión que puso rostro a la organización y lo convirtió en un personaje presente en las redes sociales, en las que anunciaba constantemente las operaciones del grupo.