Con gol de Matías Godoy a los 8 minutos del segundo tiempo, el ferroviario le ganó por la mínima al equipo del Fortín en Santa Fe y se consagró campeón por primera vez en su historia de la Copa Argentina.

Central Córdoba, de Santiago del Estero entró este miércoles 11 de diciembre de 2024 en la historia grande del fútbol argentino al consagrarse por primera vez campeón de la Copa Argentina tras vencer por 1 a 0 a Vélez Sarsfield en la final disputada en la cancha de Unión, de Santa Fe, donde también dio un salto sin antecedentes a la fase de grupos de la Copa Libertadores 2025.
Los pensamientos de los entrenadores y las posturas de sus equipos ante este compromiso que era histórico para Gustavo Quinteros tanto como para Omar De Felippe, ya que ninguno había salido campeón en el fútbol argentino pese a sus prolongadas carreras, fueron de la mano con lo que presentaron en cancha.
Por el lado del técnico velezano, de 59 años, lo que primó fue la regulación de esfuerzos y cargas, por lo que sorprendió dejando en el banco de suplentes a su jugador más inspirador, Claudio Aquino, y a un delantero de fuste como Francisco Pizzini.
Es que Vélez, que venía de perder 1 a 0 en esta misma cancha de Unión el sábado pasado, tiene otra final por delante el próximo domingo, cuando de ganarle a Huracán se consagrará campeón de la Liga Profesional.
En cambio para De Felippe, de 62 años, todos los porotos estaban puestos en este partido, y de hecho había manifestado en los últimos días que este era “un partido para pasar a la historia”.
Sin embargo, paradojas que tiene el fútbol, con Jalil Elías como mediocentro el conjunto de Liniers se hizo dueño de las acciones desde el arranque y jugó casi todo el tiempo en campo rival, manejando la pelota y siendo profundo también.
Y tuvo en jaque a los santiagueños con dos mano a mano que resolvió en gran forma el arquero Luis Ingolotti, casualmente surgido de las inferiores velezanas, sobre todo la segunda ante Matías Pellegrini.
Central Córdoba recién pudo respirar un poco recién después de la primera media hora, cuando sorpresivamente tuvo una inmejorable ocasión para abrir el marcador a través de una acrobática chilena de Matías Godoy que salvó con mano derecha en gran reacción el arquero Tomás Marchiori.

Pero ese fue un aviso de lo que sucedería no mucho después, antes de los 10 minutos del segundo tiempo, cuando ya estaban en cancha Aquino y el colombiano Luis Angulo en el “Ferroviario”.
Angulo realizó uno de los tantos slaloms que lo caracterizan por el eje central de la cancha y habilitó por derecha a un Godoy lanzado en ataque que lanzó un centro con el último aliento que se le terminó metiendo en el segundo palo a Marchiori.
Y otro no podía ser que Godoy, quien el año pasado también supo de ganar la Copa Argentina con Estudiantes de La Plata ante Defensa y Justicia.
Y aunque la conquista tuvo mucho de azarosa, con Aquino en cancha para Vélez, sin embargo, el que dominaba las acciones era el albinegro de Santiago del Estero, al que evidentemente le había hecho mejor el ingreso de Angulo que al “Fortín” el del ex Independiente.
Ese gol sorpresivo por el contexto del juego y sorprendente por la forma en que llegó, le costó asimilarlo al equipo de Liniers, y esa perplejidad les permitió a los santiagueños transitar por varios minutos de “tranquilidad”, sin pasar zozobras ante la necesidad de Vélez por igualar.
Ya no pesaba por los costados el juvenil Maher Carrizo, de 18 años, una semilla más de la cantera velezana, santiagueño él y surgido justamente en Central Córdoba, en tanto que el paraguayo José Florentín, ex Vélez, se hacía dueño del mediocampo del “Ferroviario”.
Pero claro, eso no iba a durar para siempre, y conforme Quinteros fue moviendo el banco, Vélez volvió a crecer en el juego, sobre todo cuando ingresaron el uruguayo Michael Santos y el mencionado Pizzini.
Entonces, por el empuje de unos y el natural retroceso del otro, Central Córdoba empezó a defenderse cerca de su arco y a repiquetear en las cercanías de Ingolotti.
Y el arquero respondió en gran forma otra vez en un mano a mano con Pizzini, para luego sufrir en una volada que era estéril ante un bombazo de Valentín Gómez que reventó el travesaño.
Y allí se le fue la última esperanza a Vélez. La segunda final perdida en el año (la anterior fue con Estudiantes de La Plata por la Copa de la Liga.
Y allí nació simultáneamente el hito más importante en la historia de Central Córdoba. Un logro impensado a principío de temporada, cuando el técnico no era De Felippe y el santiagueño era uno de los más firmes candidatos para irse al descenso.
Pero así como “de la gloria a Devoto” hay solamente un paso, también es cortísima la distancia “de devoto a la gloria”, y Central Córdoba es una acabada muestra de ello. Y el año que viene será uno de los representantes argentinos en la fase de grupos de la Copa Libertadores. La primera vez también para un club de Santiago del Estero.

RESUMEN
Vélez Sarsfield: Tomás Marchiori; Joaquín García, Emanuel Mammana, Valentin Gómez y Elías Gómez; Christian Ordoñez, Jalil Elías, Agustín Bouzat y Maher Carrizo; Braian Romero y Matías Pellegrini. DT: Gustavo Quinteros.
Central Córdoba (SE): Luis Ingolotti; Lucas Abascia, Yonatthan Rak, Sebastián Valdez y Rafael Barrios; Kevin Vázquez, José Florentín, Juan Meli y Rodrigo Atencio; Favio Cabral y Matias Godoy. DT: Omar De Felippe
Gol en el segundo tiempo: 8m. Godoy (CC).
Cambios en el segundo tiempo: Al comenzar Claudio Aquino por Ordóñez (V) y Luis Angulo por Abascia (CC), 14m. Michael Santos por Pellegrini (V), 27m. Alexis Segovia por Godoy (CC), Agustín Lagos por García (V) y Francisco Pizzini por Romero (V), 35m. Alvaro Montoro por Carrizo (V), 40m. Fernando Martínez por Atencio (CC) y 90+7m. Matías Benítez por Cabral (CC).
Amonestados: Bouzat (V). Florentín, Vázquez y Godoy (CC).
Cancha: Unión, de Santa Fe.
Árbitro: Yael Falcón Pérez.




